Your browser doesn’t support HTML5 audio
Hoy quiero compartir con ustedes una reflexión profunda sobre la necesidad de morir a nosotros mismos para permitir que la vida de Cristo florezca en nuestras vidas. Jesús nos enseñó que, al igual que una semilla debe morir para producir una cosecha abundante, nosotros también debemos morir a nuestro ego, a nuestro deseo de control y a nuestras propias ambiciones. Solo así podremos experimentar la verdadera vida y las bendiciones que Dios tiene preparadas para nosotros.
Es fácil caer en la trampa de pensar que tenemos todas las respuestas y que podemos manejar nuestras vidas por nuestra cuenta. Sin embargo, nuestra experiencia y nuestras emociones a menudo nos llevan a cometer errores y a tomar decisiones equivocadas. La clave está en rendirnos a Dios, en abdicar del trono de nuestro corazón y permitir que Jesús gobierne. Esto no es fácil, pero es necesario si queremos ver el propósito de Dios cumplido en nuestras vidas. La obediencia a Dios y la confianza en Su plan son fundamentales para experimentar la vida plena que Él nos ofrece.
Finalmente, quiero invitarlos a reflexionar sobre aquellas áreas de sus vidas donde aún mantienen el control. ¿Es el orgullo, la terquedad, el resentimiento o el dolor del pasado lo que les impide avanzar? Hoy es el día para morir a esas cosas y permitir que Dios tome el control.
Dios siempre llega Justo a Tiempo
P. Elias hoyos
Descargar “DE VUELTA A LA VIDA” DE-VUELTA-A-LA-VIDA.mp3 – Descargado 0 veces – 10,90 MB