¿Cuántas veces hemos dudado del poder de Dios?
Nos olvidamos de lo que El ha hecho en el pasado porque pensamos que lo de hoy es más fuerte y terminamos tomando decisiones errantes.
Tenemos que ser coherentes con lo que creemos, confesamos y hacemos, la fe nos lleva a dejar de cuestionar y tratar de entender para solo esperar sin perder la calma y luego ver a Dios actuar de maneras que nunca imaginamos.
Los enemigos de Israel subestimaron el poder de Dios, esto suele pasar cuando de levantan personas en tu contra, pero recuerda, no se trata de ti, es Dios siempre que te defiende, déjalo que lo siga haciendo.
Muchos van a pensar que de esta no te vas a levantar, que quizá Dios se olvidó y se cansó de ti, en otras palabras, dirán con lo expresaron los enemigos de Israel: Dios solo les dio la victoria en las montañas pero ahora, ataquemoslos en los valles, su Dios no es tan fuerte allí, sin embargo, no te alteres, espera en el señor, El va a mostrar que tanto en los momentos buenos como los «no tan buenos» El sigue siendo Dios, Dios de los montes y de los valles, Dios de tus montes y Dios de tus valles, Dios en tus momentos de victoria como también de tus momentos en los que te sientes desmayar.
Solo confía y prepárate para ver a Dios obrar.
Dios siempre llega JUSTO A TIEMPO
P. Eliashc