Your browser doesn’t support HTML5 audio
Más valen dos que uno, pues trabajando unidos les va mejor a ambos. Si uno cae, el otro lo levanta. En cambio, al que está solo le va muy mal cuando cae porque no hay quien lo ayude. Si dos se acuestan juntos, se darán calor, pero si alguien duerme solo, no habrá quién lo caliente. Uno solo puede ser vencido, pero dos se defienden mejor. Es que la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente.
Eclesiastés 4:9-12 PDT
Dios nos enseñó la verdad sobre el amor, es eterno pues es su escencia: Dios es Amor, nos enseñó que el amor ama antes de ser correspondido y que el propósito de unirse a otra persona en el orden correcto del matrimonio no es simplemente sentirse bien sino hacer feliz a la otra persona sin interés alguno tal y cual como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella.
Este mundo enseña todo lo contrario y es por ello que hemos entendido mal, por lo tanto, tenemos matrimonios a punto de destruirse porque consideramos que no fuimos felices pero nunca preguntamos si nuestro trabajo tuvo exito: hacer feliz al otro.
El ego, el orgullo, la vanidad y muchas cosas más destruyen relaciones y propósito de Dios en ellas hasta el punto que corremos a buscar afuera lo que Dios bendijo a dentro del matrimonio. Es importante que meditemos bien en las decisiones a tomar pues al final siempre llegarán las consecuencias.
Dios siempre llega JUSTO A TIEMPO
P. Eliashc