¿Vivimos para aparentar o para disfrutar cada detalle que Dios nos da diariamente?
Esta es una buena pregunta, pues normalmente vamos a toda velocidad enfocados en cosas que realmente son pasajeras y no son urgentes.
Vivimos endeudados para comprar cosas que lo único que sirven es para aparentar y mostrar a otras personas que no conocemos, tenemos mal las prioridades pensando que el vestido y las cosas materiales son lo más importante.
Trabajamos y no disfrutamos, pasamos todo el tiempo por fuera de casa y se nos pasa el tiempo que deberíamos pasar con la familia.
Nos volvemos insaciables, queremos más y nunca es suficiente, pedimos a Dios como si nunca recibiéramos y cuando tenemos no agradecemos porque siempre hay algo más que conseguir.
Vanidad de vanidades dice la biblia: todo es vanidad.
Vivir es más que existir físicamente, tiene sentido y propósito pero lejos de Dios nunca lo encontraremos.
Dios siempre llega JUSTO A TIEMPO
P. Eliashc
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