Cada vez que hacemos las cosas mal, abrimos puertas para que las consecuencias sean malas, estas nos afectan espiritual y materialmente y a los que nos rodean también.
Es importante caminar bajo la guía de Dios y dejemos de hacer las cosas en desorden pues cada decisión que tomamos, son puertas espirituales abiertas para mal.
Déjate guiar por Dios.
P.Eliashc