Imagínate tomar un agua que te quitaría la sed para siempre, exacto, no volverías a tener sed ¿sería algo interesante cierto?
Lastimosamente no existe esa agua, pues estamos hechos para consumir y volver a consumir, es así como por dentro también estamos hechos, fuimos creados con un vacío hecho a una medida que solo una fuente de agua puede llenar.
Podemos encontrar muchos tipos de fuente con la cual intentaremos saciar la sed que llevamos por dentro cómo ser amados, aprobados, aceptados, pero ninguna de ellas puede hacerlo por completo solo Dios.
Jesús dijo si me reciben de su interior brotaran ríos de agua viva, es decir, si le abres tu corazón para que mire en el, acederas al agua que quitará para siempre esa sed de tu corazón.
La verdadera vida está Jesús, no sigas buscando más lo que nunca podrá saciar tu sed interior.
Dios siempre llega Justo a Tiempo
P. Eliashc
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