SERIE: BENDECIDOS
El mundo espiritual es muy real, y Jesús lo expresó claramente al hablar de la libertad. Cuando Dios nos libera de ataduras y maldiciones, es un proceso que puede ser instantáneo o gradual, donde Él nos muestra áreas de nuestra vida que debemos entregarle. Sin embargo, la liberación no termina allí, pues debemos cuidar y mantener esa libertad que Dios nos ha dado.
Muchas personas han experimentado la liberación y el milagro de Dios, pero con el tiempo se han dejado enfriar espiritualmente. Han bajado la guardia, y Satanás ha aprovechado para volver a traer opresión a sus vidas. Jesús advirtió sobre esto, comparando la vida de una persona a una casa que, si queda vacía, será ocupada por espíritus aún peores (Mateo 12:43-45). Por eso, es crucial mantener una relación constante con Dios y estar llenos de su Espíritu Santo.
Hermano, no te conformes con haber comenzado bien, sino aprende a mantenerte. Si sacas a Jesús de tu vida, lo que antes gobernaba volverá a tomar el control. Cuida la libertad que Dios te ha entregado, vive en santidad y guarda tu vida para Él. Que tu vida esté llena del Espíritu Santo, pues solo así podrás permanecer y ser fiel a Dios hasta que Cristo venga (2 Corintios 5:17; Gálatas 5:1).
Dios siempre llega Justo a Tiempo
P. Elias hoyos
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