RETIRARSE, RENOVARSE, RETORNAR

En nuestra vida diaria, a menudo estamos inmersos en una constante actividad, corriendo de un lado a otro sin darnos un respiro. Creemos que estar ocupados es sinónimo de productividad, pero en realidad, este ritmo puede llevarnos a un agotamiento emocional y mental. Es crucial aprender a hacer pausas, a retirarnos y a renovarnos, para poder regresar con más fuerza y efectividad.

La Biblia nos ofrece ejemplos de hombres de Dios que, a pesar de su actividad, encontraron momentos para retirarse y fortalecerse. Moisés, Elías, Jeremías y Jesús mismo, todos ellos sabían la importancia de apartarse del bullicio para escuchar la voz de Dios. Retirarse no significa huir de los problemas, sino hacer una pausa para reflexionar y recibir dirección divina. Es en esos momentos de quietud que podemos renovar nuestros pensamientos y alinearnos con la voluntad de Dios, permitiendo que Él nos guíe hacia soluciones que quizás no veíamos en medio del caos.

Finalmente, después de retirarnos y renovarnos, es esencial regresar a nuestras responsabilidades con una nueva perspectiva y energía. Dios ya tiene el camino preparado para nosotros, y al seguir Su guía, encontramos descanso y victoria. Apliquemos estas tres R’s en nuestra vida diaria: Retirarnos para escuchar a Dios, Renovarnos en nuestros pensamientos y Retornar fortalecidos para cumplir con nuestro propósito. Así, podremos vivir de manera más efectiva y en paz, sabiendo que Dios está con nosotros en cada paso del camino.

DIOS SIEMPRE LLEGA JUSTO A TIEMPO

P. ELIAS HOYOS