Cuan expertos nos hemos vuelto en ser jueces de otros, pensamos que los demás merecen castigos fuertes y que nosotros solo somos víctimas, pero, ¿acaso no recuerdas que en algún momento fuiste perdonado por que tu fallaste?
Es como el que, por sus años de madurez, juzga a un adolescente por su inexperiencia, te hago una pregunta: ¿acaso tu no tuviste 15 años también y cometiste errores? ¿Ya se te olvidó?
Se nos ha olvidado que hoy tenemos vida solo porque Dios nos ha amado y ha tenido cada día misericordia de nosotros aún conociendo lo que hay en nuestro corazón, nos hemos olvidado que antes de ser víctimas fuimos los que oprimimos, dañamos, golpeamos.
Necesitamos recordar para darnos cuenta cuanto perdón hemos recibido y que hoy estaríamos todavía en deuda sino hubiésemos sido perdonados. Aprende a amar como ama Dios, dejemos de decir que creemos y amamos a Dios cuando somos indiferentes con los demás y no hemos aprendido a pagar con bien siempre aunque nos hagan mal.
Piénsalo…
Todos nos merecemos una nueva oportunidad.
Dios siempre llega JUSTO A TIEMPO
P. Eliashc
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